Seguimos con la hora de levantarse.
"Lucía, he seguido tus indicaciones de la semana pasada y mi niño dice que tururú, sigue remoloneando y no hay manera de que se levante. Y yo, que me hice el firme propósito de no gritar, creo que voy a sucumbir y ..."
De acuerdo. Te entiendo, pero lo primero que tenéis que saber es que las cosas no se consiguen en un día, ni en dos ni en tres...
Por la noche tienen que acostarse pronto para que duerman las horas que cada uno necesita, según su edad.
Vamos a atacar por otro frente. Si es necesario les llamamos 10 minutos antes para que puedan remolonear un poco en la cama. A mi me encanta despertar y saber que puedo estar un poco más de tiempo acurrucada y calentita antes de comenzar el día. ¿No os ocurre lo mismo a vosotros?
Por lo tanto, se acostarán pronto y, si es necesario, por la mañana los llamamos 10 minutos antes. Los despertamos, pero no les obligamos a levantarse sino que les dejamos estar un ratito en la cama.